Un rayo de sol.

El rayo de un sol dorado rompe en mil colores vivos las sombras del bosque espeso, y en cada hoja, una sonrisa.

La brisa acaricia las flores, y el canto de un pájaro se eleva entre los ecos, como una nota clara y fresca.

Ah, quién pudiera quedarme entre tanto aroma y luz, ser un suspiro del aire que amanece en la mañana.

  • Rosalía de Castro